Ignorada por la dirigencia de Morena, Gina Flores Torija, quien se registró como aspirante a la presidencia municipal de Ecatepec, acusó una evidente marginación desde la dirigencia nacional que hoy opta por abrirle camino a “la voz de unos cuántos que saben el arte del engaño” y “dejan de lado al pueblo, a la lucha social y la empatía por la ciudadanía”.
La líder social que milita desde hace 9 años en el partido que hoy ocupa el poder, denunció que tras cumplir con los requisitos para participar en el proceso de selección interna, jamás fue convocada para que le mostraran los resultados de las encuestas.
“He sido responsable en 2 ocasiones de la campaña de Morena en el distrito más grande de Ecatepec y a nadie de los liderazgos y vecinos que conozco se les ha hecho dicha encuesta”, aseguró.
Sin embargo, en los medios y en el partido se da como un hecho la imposición de la diputada local Azucena Cisneros Coss, integrantes del grupo político del senador Higinio Martínez Miranda.
Agregó que las encuestas no deben enfocarse al tema de la publicidad, sino al de la simpatía real que exista entre la gente y deben ser limpias en su elaboración frente al pueblo porque “a ellos nos debemos”. Expuso que para muchos aspirantes el pago de espectaculares, las ruedas de prensa o la distribución de despensas está fuera de su alcance y eso les resta popularidad.
“Las dichosas encuestas no son equitativas, son excluyentes, ventajosas y no debemos convertirnos en lo que tanto luchamos por erradicar”, sentenció.
Al ser cuestionada sobre la decisión de la dirigencia para actuar de esa manera, “Gina” Flores lo atribuyó al desconocimiento del territorio y a la falta de conexión con la gente.
“No se debe olvidar que el movimiento creció gracias a la pluralidad de perfiles del pueblo, la identidad de los mexicanos era un movimiento esperanzador. Podrán tener una mansión con alberca, pero sin cimientos colapsará”, añadió.
Flores Torija, quien como morenista ha sido Coordinadora regional, distrital y actualmente es cuarta regidora suplente en Ecatepec, expuso que el partido debe ser incluyente y tiene que conservar los principios que los hicieron crecer como movimiento pues:
“la suma de voluntades en lo colectivo y el conocimiento de las demandas del pueblo son de vital importancia”.
Abundó que los perfiles no deben ser ignorados y las imposiciones son del antiguo régimen, por eso no deben tener cabida en Morena.
“Estamos regenerando a la nación y se requieren perfiles limpios y nuevos”.
El trabajo de Georgina es harto reconocido en la llamada Quinta Zona, donde habitan cerca de un millón de ecatepenses, por ello sus declaraciones se contraponen perfectamente con el hermetismo que engendró la dirigencia morenista.
El dirigente nacional tiene en una verdadera encrucijada al municipio que prácticamente le otorgó la gubernatura a Delfina Gómez Álvarez en el Estado de México, donde obtuvo 3 millones 272 mil 106 sufragios, porque en su afán de convencer al electorado que hay encuestas plurales, la realidad es que los ecatepenses advierten una cargada que favorece a una mafia política.
Al final, Gina Flores hizo un llamado para que “la militancia y los aspirantes sean tratados con respeto y dignidad, en un proceso transparente, plural, equitativo, pero sobre todo informado”, de no ser así Morena en realidad se encamina hacia una ruptura política en el municipio más poblado del territorio mexiquense.
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